Mi primera réflex llegó de la mano de una maleta y una tarjeta de embarque, después de recorrer medio mundo nos trasladamos a vivir al campo, la familia creció, la maleta se quedó en el desván y mi Canon y yo buscamos nuevas facetas sin explorar.
Primero llegó la fotografía culinaria, los bodegones y el estilismo, recibiendo formación de la mano de Matías Perez Llera.
Después llegó la fotografía infantil, correr detrás de dos torbellinos ayuda a conocer a fondo las posibilidades de tu cámara.
El uso del flash y las sesiones en exteriores vinieron de la mano de Sara Lobla, fotógrafa especializada en bodas, a quien agradezco el haber contado conmigo como parte de su equipo en alguna ocasión.
Si deseais conocer un poco más mi fotografía os invito a ver mi portafolio
Tarjeta d embarque me permite abriros las puertas de mi cocina, recetas vegetarianas para disfrutar en familia, con una clara premisa, mostraros que la cocina saludable no tiene nada de aburrida.